Perdona, por usarte
de baluarte frente a lo cotidiano.
Perdona, por centrar en ti la poesía de mi vida.
Perdona, por empeñarme en seguir castigándote
con mi ímpetu adolescente.
Perdona, si te molestan mis guiños.
Perdona, por mi imaginación desbordante.
Perdona, por elegirte para colorear mi vida,
cuando el blanco y negro me asusta.
Perdona, por seguir sintiendo lo que siento.
Perdona, por no enviarte todo lo que escriba.
Perdona, por no poder compartirte
toda la poesía que mana de mí.
Perdona, por seguir escribiendo mis sentimientos,
esos que te escogen a ti como protagonista,
como acompañante por los renglones de mi lírica.
como acompañante por los renglones de mi lírica.
Yo te perdono por seguir inspirándome.
Y tú mientras, inconsciente, ajeno a este proceso
Nadie es perfecto, ¡perdóname!
Te perdono que escribas poemas tan hermosos y captes tanta belleza con la cámara.
ResponderEliminarUn abrazo.
Gracias guapetona, ya sabes, cuando necesites una foto me la pides. Un besín
ResponderEliminar